Tenía desviación mandibular y compresión maxilar con falta de espacio. Experimentaba dificultades respiratorias. Hemos logrado corregir su oclusión, eliminando la desviación mandibular que podría causar problemas musculares y articulares, así como posibles desgastes. También hemos mejorado su respiración. No ha necesitado una segunda fase de tratamiento (que suele ocurrir cuando ya tiene todos los dientes, aproximadamente a los 12 años), solo una primera fase (aproximadamente a los 6-7 años) de un año de duración.