¿Qué causa el miedo al dentista en los niños?
Los niños pueden desarrollar miedo al dentista por distintas razones, puede estar provocado por experiencias negativas pasadas y eso queda grabado en su mente inconsciente, de manera que cuando vuelve a ir al dentista, aunque sea un odontopediatra diferente, el pequeño lo relacionará con esa experiencia negativa y no querrá siquiera abrir la boca.
Otra de las razones puede ser, que sus propios padres o modelos ideales que el niño tenga, tengan fobia al dentista por alguna razón, transmiten al pequeño el miedo que el adulto tiene, contagiando al pequeño esa emoción.
En los niños particularmente sensibles también influye la experiencia en el dentista, no hay duda, de que el sillón, los sonidos de los aparatos dentales y las sensaciones no siempre son agradables, por lo que importantísimo que el dentista infantil tenga experiencia y sepa manejar la situación para que los niños se sientan más cómodos y relajados.
¿Cómo puedes ayudar a tu hijo a superar la fobia al dentista?
Sería bueno que en casa informéis al niño que va a ir al dentista, que va a visitar a su “amigo” para contarle los dientes y ver que su boca esté sana, no llevéis al niño engañado.
Otra estrategia para prevenir el miedo al dentista consiste en lograr que el pequeño se sienta cada vez más cómodo haciendo visitas periódicas, de esta manera también se diagnostican tempranamente posibles patologías y por lo tanto más sencillos de tratar.
También hay que evitar comentarios negativos, a veces los padres no se dan cuenta, pero recurren al dentista como castigo, con frases como “no comas más dulces o tendrás que ir al dentista” o “no te preocupes que no te dolerá”, con esta última expresión ya estamos alertando al niño que va a pasar algo que le va a doler dejando la mente del niño en estado de alarma, provocandole miedo, angustia o ansiedad.
Le ayudará mucho más expresiones como: “cuando el dentista te revise los dientes y vas a abrir la boca grande, luego podremos ir al parque que tanto te gusta para jugar”, aquí estamos haciendo un refuerzo positivo, esto ayudará al niño a enfrentarse mejor a la situación.
¿Cómo ayudamos a su hijo en la consulta para que la visita al dentista sea agradable para ellos?
Los niños pueden desarrollar miedo al dentista por distintas razones, puede estar provocado por experiencias negativas pasadas y eso queda grabado en su mente inconsciente, de manera que cuando vuelve a ir al dentista, aunque sea un odontopediatra diferente, el pequeño lo relacionará con esa experiencia negativa y no querrá siquiera abrir la boca.
Otra de las razones puede ser, que sus propios padres o modelos ideales que el niño tenga, tengan fobia al dentista por alguna razón, transmiten al pequeño el miedo que el adulto tiene, contagiando al pequeño esa emoción.
En los niños particularmente sensibles también influye la experiencia en el dentista, no hay duda, de que el sillón, los sonidos de los aparatos dentales y las sensaciones no siempre son agradables, por lo que importantísimo que el dentista infantil tenga experiencia y sepa manejar la situación para que los niños se sientan más cómodos y relajados.